Los equipis que funcionan con gasolina o propano pueden envenenar al usario

El año pasado, dos trabajadores que estaban limpiando en un estacionamiento subterráneo en Washington, D.C., cayeron desmayados y tuvieron que ser transportados a la sala de emergencias de un hospital donde se les atendió por envenenamiento de monóxido de carbono. También tuvieron que atender a otros dos trabajadores y a un capataz. Todos habían estado usando una lavadora de alta presión operada con gasolina o propano.

Los trabajadores pueden sufrir envenenamiento por monóxido de carbono si utilizan equipos que funcionan con gasolina o propano en lugares donde no corre suficiente aire fresco. A veces ni siquiera las puertas abiertas ni los ventiladores son suficientes para dar una ventilación adecuada. En cuatro años, los médicos del George Washington University Medical Center (GWU) en Washington, D.C. han atendido a nueve trabajadores de la construcción que han sufrido envenenamiento por monóxido de carbono al usar tres tipos de equipo: montacargas (forklifts) que funcionan con propano dentro de un almacén, sierras que operan con gasolina y una lavadora de alta presión que opera con gasolina. En un hospital de Vermont también se han atendido a trabajadores que han utilizado pulidores de piso operados con propano líquido y sufrieron el mismo problema.

El monóxido de carbono es un gas inoloro, incoloro e insaboro que entra rápidamente a los pulmones donde se adhiere a la sangre, y ésta se mueve rápidamente por todo el cuerpo. El nivel de envenenamiento depende de la concentración del monóxido de carbono en el aire, el tiempo de exposición, el ejercicio realizado al hacer el trabajo (que afecta el ritmo de respiración) y factores personales. En algunos casos, la víctima no manifiesta mareos ni ningún otro síntoma. La pérdida del conocimiento y la muerte pueden ocurrir en cuestión de minutos si la exposición ha sido alta.

En los trabajadores que sobreviven el envenenamiento, el monóxido de carbono puede ocasionar un daño irreparable al sistema nervioso.

El riesgo del envenenamiento con monóxido de carbono se puede reducir utilizando equipo eléctrico o equipo que opere con diesel, buena ventilación, vigilancia y capacitación. Pero también tiene que asegurarse que la solución no vaya a añadir nuevos problemas. El equipo eléctrico debe tener un interruptor del circuito de fallos de conexión a tierra (GFCI) para reducir la posibilidad de electrocución. El equipo operado con diesel tiene que tener los filtros correctos para que filtren las partículas de diesel en el aire ya que podrían ocasionar cáncer. El equipo operado con diesel y el equipo operado con gasolina también debe tener un convertidor catalítico, al cual se le debe dar un buen mantenimiento, para que desprenda menos monóxido de carbono.

Aun tomadas estas medidas, hay ciertos lugares en que la concentración de monóxido de carbono podría ser demasiado alta. En estos casos, se necesita monitorear el aire para asegurarse de que los trabajadores no estén expuestos a niveles de gas inseguros. Este monitoreo requiere equipo especial y personal capacitado para hacerlo.

Los contratistas y todos los trabajadores también deben recibir información sobre los peligros de utilizar equipo operado con gas en lugares encerrados. Se pueden utilizar etiquetas de advertencia. La capacitación puede enseñar cómo utilizar el equipo de una forma segura.

Estos casos fueron identificados por la Dra. Laura Welch y sus colegas de GWU. Ellos han estado estudiando problemas de salud relacionados al trabajo en trabajadores de la construcción que han sido atendidos en la sala de emergencia como parte de un programa especial del Centro de Protección de los Derechos de los Trabajadores del BCTD. El financiamiento proviene del National Institute for Occupational Safety and Health.